En el momento de llevar a cabo el cambio de nuestras ventanas, es habitual que comiencen a surgirnos las primeras dudas. Especialmente en todo lo relacionado con el material del marco de las mismas.

La elección de las ventanas de nuestra vivienda es una de esas elecciones que pueden llegar a ser especialmente importantes en nuestro hogar. Puesto que no es habitual cambiarlas de manera habitual, la elección por la que nos decantemos nos acompañará durante las próximas décadas. Por ello, acertar es clave.
Por esta razón, es importante que seamos capaces de informarnos de todo lo necesario antes de decidirnos por las diferentes opciones que hay disponibles.

¿Qué nos debe ofrecer una ventana?

Antes de comenzar la comparativa entre el aluminio y el PVC, es importante que prestemos atención a las prestaciones que nos deben ofrecer nuestras ventanas. Así como identificar cuáles son las necesidades con las que contamos.
A nivel general, una ventana debe permitir la iluminación natural de la vivienda. Por ello, es importante que esté fabricada con materiales que permitan pasar la luz durante el mayor tiempo posible. Por otro lado, también es importante que nos permita llevar a cabo la visibilidad hacia el exterior. Así como permitir la aireación y la ventilación del mismo.

Las ventajas de las ventanas de aluminio

El aluminio es uno de los materiales más adecuados para la mayoría de las aplicaciones industriales. Entre sus características principales es que nos encontramos ante un material especialmente ligero y resistentes. Por ello, uno de sus usos principales hace referencia a lo relacionado con las ventanas.
En las zonas que cuentan con un clima tropical, que permanezca intacto durante todo el año, el aluminio puede convertirse en uno de los elementos por los que podemos decantarnos. No obstante, en aquellas zonas en las que existan una mayor cantidad de necesidades de aislamiento, quizás no sea la mejor opción. Puesto que cuenta con unas muy bajas prestaciones térmicas.
Las ventajas del aluminio aumentan en aquellas zonas cuyos climas no necesitan el uso de calefacción.

¿Qué ventajas proporcionan las ventanas de PVC?

Por otro lado, las ventanas de PVC se consolidan como una opción especialmente destacada tanto para las empresas como para las viviendas, sin importar sus dimensiones o sus características. Además de proporcionar unos mayores niveles de aislamiento, también es importante destacar que su presencia incide de manera directa en el ahorro energético de la edificación.
En aquellas zonas climáticas en las que, por sus condiciones, sea necesario llevar a cabo un mayor aislamiento, su presencia es vital. Puesto que permiten proteger mejor nuestro espacio de cualquier otro elemento externo. En los países del norte de España, por ejemplo, es el tipo de ventana que más tiende a utilizarse, ya que permite una mayor protección.
Como hemos podido comprobar, son muchas las diferencias que existen en torno a la instalación de los diferentes tipos de ventanas por los que podemos decantarnos.

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